Como cada año a las once de la noche y a las dos de la madrugada las imágenes del Santísimo Cristo de las Batallas deberían procesionar por las calles de nuestra ciudad, pero esta noche, debido a la pandemia que estamos sufriendo no va a ser posible. La cruz la encontramos en forma de virus, el COVID 19, del que tanto estamos oyendo hablar en los últimos meses. Otros años acompañábamos a nuestras imágenes en los recorridos penitenciales de la noche del Miércoles Santo, hoy nos toca abrazarnos a la cruz del sufrimiento, del dolor por los fallecidos y enfermos, de la impotencia ante lo que estamos viviendo, de la desolación por la falta de medios etc. La sociedad del siglo XXI se siente superior a cuanto la rodea, cree que tiene todo dominado, que puede dar solución a cualquier eventualidad, se ha preparado para combatir a cualquier enemigo, pero no contaba que un bichito insignificante iba a hacer temblar las estructuras de todos los países, sus economías, su bienestar, sus empresas. Cuando creemos dominar el mundo, un virus inapreciable al ojo humano nos ha descubierto nuestra realidad, lo diminutos y frágiles que somos. Pero los creyentes tenemos esperanza. Sabemos que Dios está en medio de nosotros, siempre ha sido fiel a su pueblo, siempre ha estado al lado de los más débiles y cuando el hombre le ha implorado le ha escuchado.
Aunque hoy nuestras imágenes
permanecerán en sus templos, nosotros podemos y debemos hacer nuestra Estación
de Penitencia, ponernos ante el Señor y elevar a Él nuestras súplicas por todos
los fallecidos y enfermos, por los que están en la primera linea de acción en
hospitales, seguridad, transportes, abastecimientos etc., por los familiares de
los afectados, y también por la Iglesia Perseguida. Abrazarnos a la Cruz con la
confianza de que Dios nos va a escuchar. “Abrazar la Cruz es animarse a abrazar
todas las contrariedades del tiempo presente, abandonando por un instante
nuestro afán de omnipotencia y posesión, para darle espacio a la creatividad
que sólo el Espíritu es capaz de suscitar”, nos dijo el papa Francisco.
Estamos recibiendo muchos subsidios
litúrgicos para vivir esta Semana Santa tan atípica, desde la Hermandad del
Santísimo Cristo de las Batallas os hacemos algunas sugerencias.
Para esta noche, a la hora de las procesiones:
– Leer, meditar y orar con el texto de la homilía del Papa Francisco del pasado día 27 de marzo. “¿Por qué tenéis miedo?. ¿Aún no tenéis fe?”. “No tengáis miedo” y con la del Domingo de Ramos “Es difícil amar sin ser amados, y es más difícil servir si no dejamos que Dios nos sirva”. “Pidamos, mirando al Crucificado, la gracia de vivir para servir”.(Página web del Vaticano)
– El responsable diocesano del Secretariado de Pastoral Bíblica, D. Emeterio Pato Pato, ha publicado unas “Reflexiones desde la Biblia sobre el coronavirus”. Leer, meditar y orar. Éxodo 7-10 y los puntos cuarto y décimo del documento. (En la Web de la Diócesis de Ávila)
Para toda la Semana Santa:
– Semana Santa 2020 en familia. Propuesta de la Diócesis de Ávila en su página Web
– Semana Santa 2020 en la Iglesia Doméstica, en la web de la Conferencia Episcopal Española.
–
Reflexiones desde la Biblia sobre el coronavirus. Documento completo y textos bíblicos de referencia.
Pongámonos en los brazos de Dios Nuestro
Padre, de su Hijo Jesucristo, bajo la
advocación del Santísimo Cristo de las Batallas, y de Nuestra Madre la
Santísima Virgen María, para que con la fuerza del Espíritu nos ayuden a
combatir esta batalla que en estos momentos nos está tocando vivir.
Un fuerte abrazo en Cristo Nuestro
Señor.
Ávila,
8 de abril de 2020.
#SemanaSantaAvilaconlosCristianosperseguidos
